A las 17:00, las puertas y ventanas se cierran en la casa de  María Castro, en la cooperativa Virgen de Monserrate, del Guasmo central, en el  sur de la ciudad. Lo hace desde que empezó el invierno, todos los días, para  evitar el ingreso de mosquitos a su hogar.
También fumiga, coloca repelente a su hijo y nieto, y  duermen con toldo para evitar las picaduras de estos insectos.
Lo hace, pero refiere que es difícil ahuyentar a los  vectores de su entorno, que se reproducen en los exteriores de su casa, donde  hay maleza y agua empozada de las últimas lluvias.
Pero los habitantes de ese sector no son los únicos  afectados. Son veinte zonas del sur y noroeste de la ciudad las consideradas  críticas por su producción de mosquitos, tanto en verano como en invierno,  según el Servicio Nacional de Control de Enfermedades Transmitidas por Vectores  Artrópodos (SNEM).
Joubert Alarcón Ormaza, referente técnico en entomología del  SNEM, explica que la proliferación de los mosquitos se da por humedad, la  temperatura y las precipitaciones de la estación lluviosa que se registran  actualmente en la provincia.
En la ciudad hay ocho tipos; de estos, cuatro causan  enfermedades. Estos últimos, además de las molestias que causan por la picazón,  son vectores del dengue y malaria. Sostiene que tres transmiten la malaria o  paludismo y se reproducen en charcos. Pero en el periodo del 2001 al 2012, los  casos de malaria disminuyeron en el 99%.
Agregó que uno, el Aedes aegypti, transmite el dengue y su  influencia es mayor porque este se desarrolla en recipientes que se llenan con  las lluvias en los domicilios.
Por el comportamiento de los mosquitos se ha determinado que  pican sobre todo de 18:00 a 22:00. Hacen una pausa y vuelven a hacerlo por una  hora, de 03:00 a 04:00.
No obstante, según habitantes de Unión de Bananeros,  Malvinas, entre otras zonas, las picaduras se sienten todo el día.
«Aquí hay moscas y mosquitos todo el día; tengo que fumigar  la casa y, en el exterior, poner creolina y diésel para que otros insectos no  ingresen a la casa», expresa Sara Erazo, quien vive al pie de una zanja con  maleza, agua y basura, en el bloque 3 de Unión de Bananeros. Sus dos hijos  pequeños tienen huellas de picaduras.
La ministra de Salud, Carina Vance, presentó ayer el plan  invernal, en el que se destaca la participación social para combatir  enfermedades como el dengue, con el control de la reproducción a través del uso  de biolarvicida y fumigación.
Plan invernal: En la ciudad
Zonas críticas
Guasmo, Unión de Bananeros, Floresta, Esteros, Malvinas,  isla Trinitaria, Garay, Cristo del Consuelo, El Cisne, La Chala, Batallón del  Suburbio, Samanes, Florida, Mapasingue, Bastión Popular, Pascuales, Nueva  Prosperina, Pancho Jácome, Flor de Bastión y Chongón.
Fumigaciones nocturnas
El SNEM realiza fumigaciones diarias en varios sectores de  la ciudad. Anoche estuvo en zonas del sur y norte.
Recomendaciones
Eliminar objetos (llantas, botellas, tapas y recipientes)  que puedan almacenar agua y convertirse en criaderos.
Lavar y cepillar el interior de los tanques cada tres días.  Puede, además, hacer trampas artesanales, como la que este Diario recomienda  (gráfico).
Si presenta fiebre y malestar, no se automedique, acuda a un  centro de salud.